Una asociación para el progreso, Chile ingresa a la OCDE

Primer país de Sudamérica

• En 2010, Chile se convirtió en la primera nación de Sudamérica y la segunda de Latinoamérica en incorporarse como miembro a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). El primero en ingresar fue México, en 1994. Especialistas señalan que Chile era el país más destacado de la región en indicadores económicos y sociales. Dentro de las razones de por qué lo convocaron a la OCDE, están las políticas públicas y su estabilidad institucional.

Recomendaciones del organismo

Para poder ser admitido, Chile tuvo que seguir una serie de recomendaciones por parte de la OCDE, y la primera fue modificar el gobierno corporativo de Codelco.
Anteriormente, en la empresa participaban ministros de Economía, hoy en día el presidente ejecutivo es escogido por el Presidente de la República y la administración general sigue estándares de transparencia. También se instaló una institucionalidad para temas medioambientales y se creó el Ministerio del Medio Ambiente. Aplicadas esas reformas, el organismo dictaminó que Chile estaba preparado para ingresar, por lo que el trámite demoró menos de tres años.

Referente de América Latina

El ingreso de Chile a la OCDE trajo muchos beneficios para el país, fomentando el mejoramiento de políticas públicas en diversas áreas, como educación, innovación, medio ambiente, gobierno corporativo y finanzas e inversiones. Ser parte de este organismo beneficia al país porque aprende mejores prácticas y mecanismos que implementan otros países para el desarrollo de sus políticas. Al momento de ingresar al club de los países ricos, en 2010, Chile era el más destacado de América Latina en indicadores económicos, sociales y políticos.

Aprendizajes

• Chile se benefició de la capacidad de análisis e investigación de la OCDE, lo que trajo consigo que el país se volviera más atractivo para las inversiones, se facilitara el comercio entre los estados miembros y se posicionara como una economía global.
  Además, se han realizado programas educativos, en conjunto con el Ministerio de Educación, para fortalecer la etapa preescolar. A esto se suma que estar dentro del organismo genera cierto prestigio entre los países desarrollados.

Reputación positiva

Especialistas señalan que ser parte de este grupo ha permitido tener un contacto con las mejores prácticas y políticas del mundo. Además de que Chile ha llevado sus propias particularidades al seno de la OCDE, esto da una reputación positiva del país en el resto del mundo.